domingo, 22 de enero de 2012

CONSEJOS Y TRUCOS

Enseñar juegos o actividades utilitarias como las que aprenden los perros, son tareas que casi siempre fracasan con los gatos (salvo raras excepciones). Sin embargo, puedes enseñarles cosas útiles como aprender a utilizar el arenero, atender a su nombre, abrir puertas, entre otras.
El tono de voz que utilices es importante. Un tono elevado de voz le inspirará a tu gato miedo, agresión y lo hará alejarse. 
Para enseñarle a que no afile sus uñas en tus muebles, utiliza un “shhh” o un “no” con tono suave pero a la vez enérgico. También puedes recurrir a trucos sencillos como arrojarle una pelotita de papel en el momento propicio, o salpicarlo con un chorrito de agua.

Desde cachorrito, el gato puede aprender a utilizar su arenero. Para ello hay que ponerlo con frecuencia en su caja, haciendo que escarbe en la arena y guiándole sus patitas. 
Felicítalo cuando haga sus necesidades en el lugar correcto y nunca le restriegues la nariz sobre algún error cometido, pues corres el riesgo de que tu felino utilice ese lugar como su sanitario permanente.

Antes de cada comida llámalo por su nombre y acarícialo con suavidad. Así aprenderá a responder a su nombre, pues asociará dicho sonido con algo placentero como es la comida.

Finalmente no solo el amo educa al gato, el gato también educa a su amo, pues a través de la convivencia logra que su dueño realice actividades que él desea como por ejemplo cambiarle la arena de su arenero, que le abra alguna puerta o ventana, o que lo saque al jardín, entre otras cosas.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.